Hace unos días atrás Maria Inés me hizo una interesante pregunta acerca de las fotografías que coloco en mis blogs, y le respondí que suelo caminar mucho (no precisamente como ejercicio), es muy agradable para mi, sea solo o en compañía.
Cuando yo era estudiante de la secundaria, un maestro - un hombre muy afable y retirado ya en aquellos años - en mi pueblo, alguna vez nos dijo que además de caminar para ir de un sitio a otro, viéramos lo que pisábamos y alzáramos la mirada del suelo al cielo para medirnos con lo que nos topáramos.
Así en varias ocasiones nos mostró a mi y a un motón de sujetos mas, entre niños y adolescentes briosos de comerse el cerro de la Bufa a puños, y a tragos el lago "La Encantada", de muchas de la bellezas de la ciudad de Zacatecas, desde el suelo en el que nos plantábamos hasta el intenso azul del cielo zacatecano, que por frío siempre se veía mas claro.
Gracias a ese consejo, pudimos apreciar detalles que nunca antes habíamos visto de la miles de veces vistas, la torres de la catedral, o de las ventanas superiores y de los remates de los edificios, e incluso detalles de casas (entonces) lúgubres y abandonadas.
Desde entonces cada vez que salgo a pasear miro desde el suelo hasta el cielo (como ranchero en la gran ciudad), ahora, en este tipo de andanzas además de caminar, aprovecho para colgarme la camarita al cuello y fotografió lo que me agrada, lo que me desagrada y lo que me parece real o irreal, - por eso es que son una maravilla esas camaritas digitales por que puedes tomar miles de fotos y conservarlas sin que te duela el codo como cuando echaba a perder una "buena" foto con la cámara de magazines - luego sin desparpajo los montó en Polycarpio (
http://polycarpio.blogspot.com), Ojo Clínico (http://ojo-clinico.blogspot.com) o en Mexico Daily Photo (http://mexicodailyphoto.blogspot.com), y ahí los dejo para quienes gusten verlo y hasta dure este blog o este bloguero.
Finalmente... ¿que que es lo bueno?, lo que te guste,
¿como conocer lo bueno?, por que conoces lo que te desagrada y que es lo malo,
aunque no siempre lo bueno es agradable ni lo agradable es lo bueno.
Bueno, dejémosnos de buenos y de malos y ahí nos vemos.
Viva la diversidad.